viernes, 29 de abril de 2016

El nacimiento del río Tinto, a vista de dron



El río Tinto (o Iberus, Urium, Luxia, de antiguas culturas) es un río del sur de España, que discurre a lo largo de la provincia de Huelva.

Nace en la sierra de Padre Caro, en Nerva (Huelva), muy próximo a la corta de Peña del Hierro. Esta corta, o explotación minera a cielo abierto, se encuentra a unos 3 kilómetros de Nerva, y debe su nombre al gran crestón ferruginoso que corona la mina. Dicha mina, perteneciente al espacio protegido, destaca por su profundidad y por el lago multicolor que se crea en su fondo. Por supuesto no puede faltar en nuestra ruta de la minería Nerva. Pronto volaremos sus raices y sus amapolas.

Casi 100 kilómetros de serpenteo rojo es lo que necesita para fundirse con el río Odiel en la ría de Huelva.

El nombre del río proviene de su color rojizo (como el vino tinto), que pasa a ocre en las orillas. Estas tonalidades se deben al alto contenido en sales ferruginosas y sulfato férrico que, junto a la escasez de oxígeno, otorgan un PH muy ácido. En sus orillas se presentan estructuras características, resultado del enfriamiento de la escoria y los residuos mineros.

Gran parte de las condiciones de extrema acidez alcanzadas en el río eran originadas por la actividad de ciertos microorganismos que son capaces de sobrevivir oxidando los sulfuros metálicos como la pirita. La oxidación de la pirita produce la generación de una solución ácida con alta concentración en hierro oxidado, que es la sustancia que da el color característico al río Tinto.

Aunque pueda parecer que en tales condiciones no sea posible la vida, estas aguas acogen una gran diversidad de microorganismos que se alimentan sólo de minerales. Se han reconocido organismos que no requieren luz solar para su supervivencia, sino depósitos minerales de cuya oxidación obtienen energía.
Estas circunstancias han planteado la posibilidad de llevar a cabo estudios comparativos con Marte, un planeta en el que el hierro es ubicuo y ha tenido gran cantidad de agua superficial en diferentes momentos de su historia geológica.

La zona comprendida entre los tramos alto y medio del río y su entorno, es decir, unos 57 Km a lo largo de la provincia de Huelva y Sevilla ha sido declarado Paisaje Protegido.

Hablar del río Tinto sería extensísimo. Un capítulo aparte merece cuando alcanza su esplendor a su paso por los vanos del puente romano de Niebla. Pero no nos adelantemos a los acontecimientos, el rojo iliplense lo mostraremos en breve.

Las imágenes nos muestran un Tinto infantil, recien nacido que aún duerme:
"Duérmete, niñito mío,
que tu madre no está en casa;
que se la llevó la Virgen
de compañera a su casa".
(Nana - Federico García Lorca)

Vuelo complicado, sobre todo las primeras tomas, mal tiempo y rachas de viento. Al final, la Pachamama nos dejó introducirnos en su parte más superficial.
Volamos en el cielo de los colores, comenzamos con el verde, más tarde el rojo predominaba por doquier; el amarillo y los ocres no eran sólo acompañantes ocasionales.

En Nerva hablamos con algunos mineros que nos contaron historias de otro tiempo, compartiendo un buen vaso de vino tinto, ¡Cómo tiene que ser!

José Antonio Portero 

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