miércoles, 23 de marzo de 2011

Recuerdo a un maquinista (por Nicolás Chaparro)


El maquinista Paco Alcázar Marín. Foto: Colección Familia Alcázar


E
l ferrocarril por el que dejaste una gran parte de tu vida y que trataste con tanto cariño, ilusión, gran afición, con alta profesionalidad y también con enormes sacrificios, hoy querido “Paco”, mejor que desde donde te encuentres, no mires hacia él, te ha traicionado, nos ha traicionado a todos.

Los dueños de lo ajeno y con las autoridades mirando hacia otro lado, lo han destrozado y se encuentra en unas condiciones irreconocible, le han hecho perder todo su encanto del que disponía, es mucho mejor, no te acuerdes de él jamás, ya que sufrirías enormemente.

En los tiempos que te conocí, yo era un chico de 13 años, recuerdo en la estación de Manantiales, en las viviendas a la salida hacia Riotinto y a unos 40 metros de la toma de agua, mi madre Rosa, siempre tenía preparada agua fresca para vosotros, maquinistas, fogoneros y guardafrenos.

Casas en la Estación de Manantiales. Foto: N. Chaparro.

Aprovechando la parada de los trenes para repostar agua, limpiar el fuego de las locomotora y abastecerse de carbón la cabina, nos hacíais visita para saciar la sed y refrescarse del enorme calor y el trabajo duro de aquellas locomotoras del tipo 40 toneladas.

Compañero y querido “Paco”, recuerdo aquellos años de nuestra juventud en la Vía General, fuiste muy apreciado y querido por todos, hasta te surgió un amor Platónico, que tu nunca apreciaste, pero yo sí, nuca lo supiste y menos lo conociste.
Siempre te mantendré en el recuerdo.


Nicolás Chaparro

2 comentarios:

Miguel dijo...

Seguramente seré alguien al que Paco Alcázar no recordaría si aún continuara entre nostros; seguro que éste comentario pasará inadvertido y puede que ni siquiera tenga importancia; pero yo quiero recordate cómo te conocí desde pequeño; cómo a tantos otros maquinistas que diariamente pasábais por la estación de Naya, al mando de aquellas negras locomotoras que constantemente subían y bajaban. Te recuerdo Paco especialmente, sobre todo porque cuando pasabas por Naya, a la vuelta de tu dura jornada diaria, después de dejar los vagones vacíos para que nuavamente fuera cargados de mineral en las tolvas de Zarandas, gustabas de ponerte en la parte izquierda de la locomotora, para saludarnos con tus gestos a cuantos niños nos habíamos aposentado, próximos a la estación por donde pasabas. Recuerdo tu gesto saludándonos a todos.Recuerdo cómo abandonábamos nuestro juegos, para recibir con entusiasmos tus saludos, que en ocasiones consistía en llevarte tu mano derecha a la sién, cómo si de un saludo militar se tratara. Recuerdo con nostalgia, cómo mientras duraba la maniobra de soltar los vagones vacios en Naya, tantas veces cómo pasaras por donde nosotros estábamos, otras tantas saludabas, y siempre con el mismo gesto, aunque a veces no podías aguantar el esbozar una amplia sonrisa que salían de tus labios, dejando entrever tus dientes blancos que contrastaban con la tizne del carbón que por el sudor tenías adherido a tu cara.

Sirvan mis torpes palabras, cómo un pequeño homenaje en agradecimiento a cuantos saludos nos hacías cuando pasabas por Naya.

gilda dijo...

soy un gran admirador de PACO ALCAZAR,tambien conozco bastante a su hijo jose,y lo que quiero comentar es el grandisimo corazon que tenia PACO ALCAZAR y que tambien lo tiene su hijo jose que tambien lo se bien.PACO era un gran maquinista de la via general por no decir el mejor,por lo que le digo a su nieta carmen que puede estar muy orgullosa de su abuelo PACO,y que el cuadro publicado en este homenaje pintado por justo duran(que no se quien es) no se parece en nada a su abuelo PACO ALCAZAR,esto es un insulto a la memoria de este hombre que se merece todo nuestro respeto. justo duran qe se dedique a robar gallinas. NERVA 24/11/2012 un saludo a la familia ALCAZAR