Réquiem por La Mina IV (Por Antonio Perejil- Delay)

Plaza de La Mina (A.P.D)

IV

Y para mayor ostentación de poderío, construyeron una barriada inglesa, con muros de un metro de anchura y tejas planas, que provocaban la envidia y la admiración de los mineros esclavizados y oprimidos por La Compañía. Y en la Plaza de La Mina se instalaron bancos de hierro, con las iniciales RTC, pomposamente escritas en sus espaldares…Hasta que llegó el trágico 4 de febrero de 1888, y aquellos bancos se llenaron de sangre inocente, que aún no hemos podido borrar de los libros de historia donde quedaron archivados los nombres de aquellos mártires obreros que dieron sus vidas por luchar contra los humos que vomitaban las teleras.

Los gobiernos de entonces creyeron que esta vergonzosa página de la Historia de España terminarían olvidándola las generaciones venideras, y la ocultaron voluntariamente para que nunca se supiese la verdad…pero cuando la verdad está teñida de sangre y los muertos llaman con sus manos frías a las puertas de la conciencia colectiva, ésta se alza siempre por encima de todas las cosas y sus gritos de venganza se oyen por todas partes.